La verdadera historia de Papá Noel

Conozca la verdadera biografía de Nicolás de Mira, el santo católico que dio origen a la figura legendaria del "Papá Noel".

 

 

San Nicolás, cuya memoria la Iglesia celebra este 6 de diciembre, se hizo conocido por su costumbre, según una antigua tradición, de entregar regalos secretos a los pobres y necesitados, lo que le valió ser la figura hoy tan conocida del "Papá Noel ", Bastante común en los festejos de Navidad.

 

En nuestros días, sin embargo, lo mítico sobrevivió al místico: la leyenda explotada con fines comerciales acabó ofuscando la verdadera biografía de este gran hombre. ¿Cuál es, entonces, su verdadera historia?

 

Nicolás nació en la antigua ciudad de Pátara, territorio de la actual Turquía, hacia el año 270, siendo educado por una familia de padres nobles y muy virtuosos. Su deseo de dedicarse a Dios brotó en la más tierna edad, haciéndole vivir enteramente devoto a la Palabra de Dios, de tal manera que, habiendo heredado, con la muerte de los padres, gran fortuna, se hizo sólo un administrador de aquellos bienes que se convirtieron de los pobres.

 

Al mudarse a la ciudad de Mira, donde quiso vivir más secretamente, Nicolás, ya muy virtuoso y de una piedad divina, fue aclamado obispo, y luego se hizo famoso tanto por los innumerables milagros que por él Dios realizaba como por su gran caridad, de la que procedían las limosnas y los presentes "secretos" a los necesitados.

 

Nadie confunda su caridad, sin embargo, con lencería o complacencia.

 

En ese sentido, un episodio marcante de su vida quedó registrado en las actas del Concilio de Nicea, la primera gran reunión de obispos de la Iglesia Católica, ocurrida en el 325. En la ocasión, los cristianos se enfrentaban a una gran y peligrosa herejía: el arianismo, que negaba la divinidad de Jesús. El historiador católico Daniel-Rops relata que cuando los obispos allí reunidos oyeron "algunos fragmentos" de los escritos de Árrío, "los errores se mostraron tan patentes que una ola de indignación sacudió a todos aquellos hombres fervientes" [1].

 

Uno de ellos fue justamente el "buen viejito", San Nicolás: ya cansado de la insolencia de Árrio, se cuenta que el valiente obispo confrontó físicamente al hereje, abofeteando la boca.

 

Los prelados alrededor se asustaron y, aun en desacuerdo con Arrio, se vieron obligados a castigar el "celo excesivo" de Nicolau, encerrando al obispo en la cárcel y confiscando su palio y la copia que tenía de los Evangelios. La respuesta del Cielo a la ira de San Nicolás, sin embargo, parece haber sido otra. Algunos días después de lo ocurrido, los mismos Jesús y María visitaron al obispo en su celda. "¿Por qué estás aquí?", Preguntó Nuestro Señor a Nicolás, al que él respondió: "Porque os amo, mi Dios y Señor" [2]. Inmediatamente, le fueron devueltos los símbolos de su dignidad episcopal.

 

Es por eso que, en muchos iconos del santo, es posible verlo flanqueado de Nuestro Señor y de Nuestra Señora, respectivamente con un libro y un palio en las manos. Destituido del oficio episcopal por sus hermanos, el obispo de Mira terminó el gran Concilio de Nicea readmitido directamente por el propio Dios.

 

Hoy, San Nicolás es muy venerado tanto en el Oriente, donde nació y ejerció su ministerio episcopal, como en Occidente. Fue de la ciudad italiana de Bari, al final, donde se encuentran sus reliquias, que la devoción al "buen viejito" se extendió por todo el continente europeo.

 

Santo Tomás de Aquino, por ejemplo, fue un gran devoto de San Nicolás. Fue en un 6 de diciembre, a propósito, que el Doctor Angélico, celebrando Misa en una capilla dedicada a San Nicolás, recibió de Dios una visión que lo hizo decir, pocos meses antes de entregar su alma a Dios: "Todo lo que he escrito hasta hoy me parece únicamente paja, en comparación con lo que he visto y me ha sido revelado ". Sin lugar a dudas, un regalo extraordinario recibido por las manos de San Nicolás.

 

En este tiempo de Adviento, preparando la venida del Señor, pidamos a San Nicolás que obtenga también a nosotros este don de Dios: el desapego de este mundo de paja y la posesión inamovible de Cristo.

 

San Nicolás de Mira y de Bari,

¡ruega por nosotros!

 

 

Fuente: https://padrepauloricardo.org/blog/a-verdadeira-historia-do-papai-noel

 

Referencias

  1. Henri Daniel-Rops, A Igreja dos Apóstolos e dos Mártires, São Paulo: Quadrante, 1988, p. 455.
  2. Taylor Marshall, Saint Nicholas Allegedly Punched This Heretic in the Face…Who was He?.

 

 

 

 

 

Escribir comentario

Comentarios: 0